Una llamada me despertó en la tarde, quería continuar
durmiendo pero conteste…Escuche la voz
apagada de una amiga, otra chica perdida como yo, tenia la voz desesperada casi
en lágrimas, comprendí que necesitaba mi ayuda...La escuché. Ella siempre estaba en las
buenas y en las malas, pienso que la deje sola por puro egoísmo…Es hora de pagar
mi deuda con ella. Muchas veces mi familia no entendía mis estados de animo
decía que debería relajarme, salir un poco o simplemente pensar en Dios, son
las típicas palabras de mi madre y que decir de mi padre lo cual guardo mis
comentarios. Pero bueno “Bel” tiene la misma enfermedad que yo, pero con un
detalle muy grande, ella no sabe que es una enfermedad. Siempre decía que no se
siente normal, que se siente estúpida por ser como es y que su familia en vez
de apoyar y comprender su situación la hundían en duras criticas destructivas. Siento que esta a tiempo
de controlarse, de ser escuchada, de
pelear por su vida, no quiero que se rinda como yo lo estoy haciendo.
PS: Querida “Bel” te pido perdón por las heridas
que te cause… Eres hermosa por dentro y por fuera, Tu fragilidad es un don y no
una maldición …Las lágrimas son maravillosas si las derramas con alegría…Mi
deseo es que tu las derrames por mi.
Tus Piezas Están Tiradas…Las Recogeré Por Ti y Pegare Las Piezas Rotas.
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