Había tempestades donde vivías
Entre truenos y relámpagos
Apagaron tu voz inocente.
Los escuchabas gritar…Tapando
con tus manos pequeñas tus
Oídos ensangrentados,
diste un quejido casi taciturno y agregaste:
“Tengo esperanza…
Esperanza es la que me
mantiene en pie,
Esperanza al escuchar sus
risas sin amargura,
Esperanza de juntar a mi
dúo iracundo”…
Pensaste que te
abandonaron tus ángeles de alitas doradas,
Que jugaban contigo en tu
viejo árbol de Roble…
Tú amigo; Quizás el único
que escuchaba tus gritos en silencio.
Mírame te exclamo, porque:
“Esperanza es la que me
mantiene de raíz a esta tierra seca,
Esperanza es al ver nacer
mis frutos,
Esperanza es al sentir
caer la lluvia en mis hojas,
Esperanza es que estoy
aquí”…
Quedaste quieta en sus
ramas
Pensando en sus palabras;
Que el tiempo pase para
ti…El olvido será tu mejor aliado,
Aunque estés atrapada en
el limbo de la Tirria…
Pero de alguna manera tu
respondes:
“Esperanza es que me mueve
a no volver a tras
Esperanza es que todavía
respiro
Esperanza es estar de
rodillas suplicando perdón
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